Dolor muscular por un golpe y cómo aliviarlo

Cuando recibes un golpe, este puede ocasionar dolor muscular. Los dolores musculares por golpes también pueden venir acompañados de moretones (también llamados contusiones) e hinchazón. La mayor parte de los golpes ocurren por accidentes en medios de transporte (desde bicicletas hasta automotores) o por la acción de objetos que impactan al cuerpo.

Aquí te contaremos todo lo que debes saber sobre el dolor muscular por un golpe. Los tipos de golpes que existen, cómo tratarlos y cómo detectar su gravedad.

¿Qué ocurre al recibir golpes en diferentes partes del cuerpo?

Los golpes se pueden clasificar de acuerdo a la parte del cuerpo en donde ocurren:

Golpes en el abdomen: Posiblemente el tipo de golpe más común (Isenhour y Marx, 2007). Ocurre generalmente en accidentes automovilísticos, cuando el conductor se golpea en el área abdominal en contra del volante o el tablero o, incluso, por la acción del cinturón de seguridad (Bansal y colaboradores 2009). En los casos menos serios causa tan sólo moretones, pero en los peores casos puede causar la ruptura de los órganos internos.
Golpes en el tórax. Los golpes en el pecho (o tórax) pueden llegar a dificultar la respiración o afectar el ritmo cardiaco. En algunos casos muy graves puede incluso ser necesario hacer una intervención quirúrgica de emergencia que consiste en insertar un tubo torácico para restaurar la presión de los pulmones y facilitar la respiración (Falter y Nair, 2012).
Golpes en el cráneo. Cuando se golpea la cabeza, es muy importante revisar que no existan lesiones en el cuello y en el cerebro. Es por esto que se recomienda colocar un collarín y también examinar las respuestas comportamentales del accidentado. Si se desmaya, vomita, habla y actúa sin sentido, si sangra por la nariz o por el oído acuda a un hospital urgentemente.
Golpes en las extremidades. Las caídas son la principal causa de golpes en las extremidades inferiores, mientras que el uso de herramientas es la principal causa para las extremidades superiores (Søreide, 2009). Es común que se acompañen por fracturas de los huesos y las articulaciones. Por tanto, muy importante determinar la capacidad de movilidad de la extremidad después de un golpe.

Algunos expertos recomiendan una serie de pasos para lograr disminuir los síntomas causados por un golpe. A este protocolo lo han llamado el Protocolo RICE, por sus siglas en inglés. Fue propuesto por Gabe Mirkin, en el año de 1978, y desde entonces se usa ampliamente como primeros auxilios en el caso de golpes y dolores musculares. A continuación te lo explicaremos:

REST – Descansa. Si es posible, deja descansar el área lastimada de cualquier actividad extenuante por 1 o 2 días.
ICE – Hielo. Coloca un paquete frío sobre el área lastimada por 20 minutos. Repítelo entre 2 a 3 horas durante el primer día o dos, especialmente después de realizar actividades. Puedes construir un paquete frío colocando hielo en una bolsa de plástico o envolviendo algo de hielo en una toalla. ¡Cuidado! No coloques el hielo directo en tu piel o podrías causarte una quemadura.
COMPRESSION – Compresión. Para reducir la hinchazón puedes ayudarte de vendajes elásticos, pero no los uses muy ajustados.
ELEVATION – Elevación. Si te es posible, levanta el área afectada por arriba de tu torso para reducir la hinchazón.

¿Cuándo buscar ayuda médica?

Los síntomas por un golpe son de poca duración y deberían pasarse en unos pocos días. Sin embargo, el Centro de Salud Pública de la Armada de los Estados Unidos recomienda que es necesario consultar a un médico si los síntomas continúan después de 5 días.

También debes buscar ayuda médica si tienes alguno de los siguientes síntomas:

El área afectada duele cuando está en reposo
El dolor va en aumento conforme pasan los días
El dolor dificulta mover alguna articulación
La hinchazón va en aumento o se observan cambios en el color de la piel

Para reducir la hinchazón tu médico te puede recetar algunos antiinflamatorios como el ibuprofeno o la aspirina

Complicaciones serias

Siempre debemos tener cuidado de tratar adecuadamente los golpes musculares. Si no se tratan adecuadamente, las lesiones musculares pueden resultar en complicaciones médicas serias. Entre los problemas más comunes están el síndrome compartimental y la osificación muscular:

Síndrome compartimental. Si desarrollas sangrado interno por una lesión, la presión puede causar que tus tejidos se hinchen. Esta condición puede reducir el flujo de sangre a tus células, lo que lleva a muerte local de tejidos e incluso la pérdida de alguna extremidad.
Osificación muscular. Un moretón muy profundo o golpes repetitivos sobre un mismo músculo pueden ocasionar que los músculos se endurezcan hasta formar hueso. Esta complicación puede afectar gravemente tu rango de movimiento.

Prevención

Los golpes más peligrosos son aquellos que pueden afectar a los órganos internos y provocar hemorragias. Por lo tanto, debemos tener especial cuidado para evitar los golpes abdominales torácicos y craneales. Como se dijo, estos golpes ocurren principalmente en medios de transporte cuando el cuerpo viaja a gran velocidad y los impactos son potencialmente más graves. El uso de equipamiento adecuado como cascos y cinturones de seguridad pueden proteger nuestro cuerpo.

Bibliografía:

¹ Isenhour JL, Marx J . (2007). Advances in abdominal trauma. Emergency Medicine Clinics of North America, 25(3), 713-733.
² Bansal V, Conroy C, Tominaga GT, Coimbra R (2009). The utility of seat belt signs to predict intraabdominal injury following motor vehicle crashes. Traffic Injury Prevention. 10 (6): 567–72.
³ Falter F, Nair S (2012). Intercostal Chest Drain Insertion. Bedside Procedures in the ICU. Springer, London. pp. 105–111.
⁴ Søreide K (2009). Epidemiology of major trauma. The British Journal of Surgery. 96 (7): 697–8. doi:10.1002/bjs.6643. PMID 19526611.
⁵ US Army Public Health Command. (2012). Self-care Instructions for Muscle Pain and Bruises. Revisado: 12/12/18, de Women’s Health Portal Self-Care. Sitio web: https://phc.amedd.army.mil/PHC%20Resource%20Library/Muscle%20Pain%20and%20Bruises.pdf
⁶ Mirkin, G., & Hoffman, M. (1978). The Sportsmedicine Book. Boston, MA, USA: Little, Brown.
⁷ Kiara Anthony. (2018). Bruised Muscle (Muscle Contusion). Revisado: 12/12/2018, de Healthline Sitio web: https://www.healthline.com/health/bruised-muscle

Al hacer click en estos enlaces, lo llevaran a una página web externa que no es administrada por GSK. GSK no asume ninguna responsabilidad por el contenido de estos sitios web. Si no desea dejar nuestro sitio web, no haga click en estos enlaces.